La idea de que la respuesta de Europa a la crisis económica debería basarse en la emisión común de deuda perpetua ha ido ganando terreno poco a poco, pero las propuestas que implican aumentos sustanciales de la deuda de los Estados miembros corren el riesgo de obstaculizar el crecimiento durante las próximas décadas. Esta propuesta argumenta que ha llegado el momento de realizar un verdadero gasto europeo, financiado a través de emisión de deuda europea. Se examinan las cuestiones jurídicas y financieras en torno a la posible aplicación de una propuesta para que la Comisión emita anualidades consolidadas («EU Consols») que sirvan para financiar un paquete de reconstrucción económica de un billón de euros.